miércoles, junio 28, 2006

PUEBLOS MALDITOS
Moncho Abella
Tengo la impresión de que no se hizo caso a las necesidades de las gentes de mi zona , a los que por desconocimiento y sentirnos diferentes se nos marginó de tal manera que ahora como reacción se ha creado un caparazón de automarginación orgullosa que nos impide mostrar nuestras diferencias al mundo exterior.
Creándose así una doble línea de oscuridad y desconocimiento, por un lado por el rechazo de los unos y por otro el autoaislamiento.

Como dice Juan G. Atienza en el libro "Guia de los pueblos malditos españoles" (ya he hablado en otras ocasiones de su libro "los santos imposibles") : "suele suceder en estos casos de segregación y desprecio que la persona segregada acaba por tomar conciencia y orgullo de la discriminación y cuando el discriminante se siente conciliador, entonces es él quien quiere mantener la distancia y dar a su postura la categoría histórica, emocional y biológica que indudablemente posee".

En lo referente a nuestra zona no he logrado saber cuales fueron estos motivos diferenciales , son datos misteriosos , hoy en día difíciles de rastrear, cuyas razones se han perdido, olvidado o diluido en el tiempo, apuntando a veces a algún elemento secreto ¿de los propios pueblos que no querían compartir con los demás?...Yo creo fue nuestra pertenencia a los vaqueiros de alzada, pueblo trashumante que ocupaba la zona oeste de Asturias y norte de León, de quien se nos separó en la actual división de provincias cortando nuestros lazos de unión con los grupos asturianos.
Me baso en que hay varios pueblos en esta zona con brañas que se ocupaban en verano, Burbia (Algueiras), Aira da Pedra (Campodelauga) y Villar de Acero (A Serra, llamada también a Braña o las Alzadas de Villar de Acero), incluso los camposos hacían a veces una segunda trashumancia haciendo cabanos (chozos en el monte con techumbre de piorno) donde a veces pasaban varios días por turnos guardando el ganado, los de Porcarizas también hacían cabanos nas Carcas aunque en su día más arriba de Boiseco tuvieron unas alzadas fijas.

Gaspar Melchor de Jovellanos en su carta a Antonio Ponz fechada en 1793 lo explica de la siguiente manera: "Vaqueiros de Alzada llaman aquí a los moradores de ciertos pueblos en los concejos que están al ocaso , cerca del confín de Galicia. Llámanse vaqueiros porque viven comúnmente de la cría del ganado vacuno ; y de alzada, por que su asiento no es fijo, sino que alzan su morada y residencia a las montañas altas".
"Las poblaciones que habitan, si acaso merecen este nombre, no se distinguen con el título de villa, aldea, lugar, feligresía, ni cosa semejante, sino con el de braña, cuya denominación peculiar a ellas significa una pequeña población habilitada y cultivada por estos vaqueiros".

Los Vaqueiros de Alzada pasan el invierno en sus pueblos y al llegar el verano, cogen sus pertenencias (familias, rebaños, animales y utensilios) y se desplazaban en caravana hasta las tierras altas para alimentar el ganado. Aunque las fechas son muy variables dependiendo del clima, las fechas de la trashumancia solían ser del 8 de mayo al 29 de septiembre (del San Miguel de mayo al San Miguel de septiembre, ángeles vencedores de los espíritus malignos). Los que hayan visto el reportaje "los Ancares" de "Vivir cada día" de hace unos cuantos años, estarán de acuerdo conmigo en que Maria y Raúl en Campodelauga eran una familia que se ajusta en todo a las costumbre y forma de vida de los Vaqueiros.

Aún hoy a los habitantes de Aira da Pedra les llamamos camposos, dándoles el gentilicio de la braña de verano. Esto hacia que a veces hubiera duplicidad de empadronamiento o que no estuvieran empadronados en ningún pueblo. Quizá esta falta de empadronamiento hacia dificil su control y el cobro de impuestos, quizá el motivo tal vez del aislamiento y desprecio de la gente de los valles.

Seguiré recopilando datos, salud para todos,

Ramón Abella

jueves, junio 15, 2006

EL JUEGO DE BOLOS EN VILAR
El otro día por motivos de trabajo tuve que subir hasta Porcarizas era Domingo y cual fue mi sorpresa qua al llegar vi que estaban jugando los bolos, no se si la partida era grande o pequeña pero fue suficiente para que mi memoria retrocediera 30 ó 35 años atrás.
Empecé a recordar que la “liga” o campaña de los bolos en Villar, comenzaba siempre el día de San José, 19 de Marzo, a partir de esa fecha todos los Domingos y festivos después de de comer y jugar las partidas de tute en “casa de Rosario” los mozos y casados iban bajando pueblo abajo “po aira do Teso”, las bolas ya estaban hechas, así que con una sierra de mano y algún “pau das fabas de rebolo” que cogian en algun corral hacían los 30 ó 40 bolos, unos los cortaban, otros los pelaban y les quitaban los nudos, otros iban a buscar “a bula” para pegarlos a la piedra, casi siempre “a corte de Miliano” que estaba al lado, otro hacia la raya con un palo largo afilado, desde la esquina de casa de Lorenzo y Delfina hasta a calella , otros apartaban algún “tranco de leña” ya que la aira estaba siempre con leña por la orilla del huerto de “tia Manuela”, tenia leña, Caburana, a Tia Manuela y Jesús de Mercedes Una vez preparados, los bolos, las bolas, el campo de juego y la bula al lado de la piedra se hacia la partida y para ello se iban colocando los jugadores de 2 en 2, tiraban una perra al aire y se iban juntando, las caras para un lado y las cruces para el otro, siempre tenían que ser pares y se trataba de que los buenos jugadores fueran repartidos en los dos equipos para equiparar el juego, luego un jugador de cada equipo, pedían la mano, también con el azar de una perra al aire, esto era muy importante ya que a tantos iguales ganaba la mano, que era del equipo que había sacado “cara” y empezaba a tirar la primera bolada, y si al final empataban, ganaba la mano, de ahí el dicho “ganeiche po-la mau” Ya con la partida en marcha se iba a la “Cantina de Tía Pilar”(mi abuela) se traía el garrafón de vino y la jarra para beber donde bebían jugadores y publico conjuntamente. Yo recuerdo ya mas la época en que se llevaba para el juego una o dos cajas de cervezas “marca SKOLL y ya después EL LEON, era lo que había y por supuesto estaban de la bodega, no había neveras ni cámaras frigoríficas. Siempre recuerdo, era como una ley no escrita, que la bebida para el juego de bolos siempre se compraba en casa de “Tia Pilar” y no en ninguna de las otras cantinas. Continuara……………….. un saludo……villar